Seguridad en Ruta
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Seguridad en Ruta
ANUQ, preocupada por la Seguridad Vial y la de los usuarios de quads, ha realizado una adaptación Off Road de unos consejos para conducir en grupo en quad, con objeto de que podamos seguirlos en nuestras salidas:
PREVENIR ACCIDENTES
Generalmente utilizamos nuestros quad compartiendo salidas de fin de semana con nuestros colegas, y lo hacemos en grupo...El problema principal radica en que dejamos surgir nuestro temperamento competitivo frecuentemente y, unos por otros, circulamos por encima de nuestras posibilidades. Está claro que evitar esos sustos y accidentes tienen fácil solución, ya que de la mayor parte de estos incidentes es responsable esta competitividad, con lo que la solución la tenemos nosotros mismos haciendo tan sólo un examen de conciencia, y no dejarnos llevar.
Aparejado al problema principal sobrevienen otros: no dejar la suficiente distancia de seguridad entre vehículos, con los consiguientes alcances ante imprevistos; no prestar suficiente atención a la conducción puede producir salidas de vía; o incluso intentar recuperar un tiempo perdido por alguna eventualidad breve, puede conducirnos a un accidente de determinada gravedad. Evitar esto está en nuestras manos, apreciando nosotros mismos las circunstancias que nos rodean.
Una maniobra que merece especial atención son los adelantamientos, aunque se trate de una pista ancha, constituyen un factor de riesgo muy alto, ya que, generalmente, la configuración de los caminos no permite esta maniobra y un enganche de dos quad puede resultar fatal. Se hace necesario respetar escrupulosamente un orden dentro del grupo y no quebrantarlo bajo ningún concepto.
También hay que dar un toque de atención a aquellos amigos de la “conducción divertida”. Demostrar quien es el más rápido del barrio, un “fredispencer” que se sitúa de guía y mantiene un ritmo alto durante la ruta para demostrar el porqué de llevar esos “galones”, no es necesario. Debemos ponernos en la piel de aquéllos que nos acompañan y tienen escasa experiencia, o incluso aquéllos que por determinadas circunstancias llevan tiempo sin montar, con lo que el guía del grupo tendrá que adecuar su velocidad a la del compañero más lento, esto hará más sólido al grupo, y mientras los novatos aprenden a su ritmo, los más expertos podrán disfrutar de los paisajes.
Es cada vez más común que el usuario de quad veterano tenga más de 30 años, y cierta experiencia en la conducción de quad. Que la experiencia, pues, nos haga más sabios en lugar de más rápidos...
SOLUCIONES
La solución a todos estos problemas las tenemos en nuestras propias manos. De viaje es preciso guardar aún más la distancia de seguridad debida, y se debe circular ligeramente fuera de la estricta "fila india", con suficiente distancia entre vehículos y con luces encendidas: ello permite una correcta visión trasera del grupo a través de los retrovisores.
Debemos recordar que en ruta es necesario ser el “ángel de la guarda” del compañero que llevamos detrás, de este modo todos estaremos siempre controlados por algún compañero si nos surgiera algún incidente, pudiendo limitar incluso el ritmo del grupo, simplemente “soltando gatillo”, si alguno de sus componentes se encuentra incómodo con la marcha que llevamos.
Además, con esto evitaremos tener que volver sobre nuestros pasos para ver qué le ha ocurrido a ese colega que no llega a nuestro punto. Esta maniobra no tendría que realizarse si vigilamos convenientemente a nuestro compañero de detrás, y llegado el caso de tener que practicarla, la realizaremos con suma precaución, ya que generalmente nuestro compañero rezagado intentará llegar a la mayor brevedad posible, lo que unido a lo estrecho de los caminos puede llevar a un choque frontal y sus fatales consecuencias.
EN RUTA
Cuando eres el guía: Mantén un ritmo consistente, suficientemente atento como para que todos disfruten de la conducción, y aplícate a marcar una buena trazada y a dibujar unas maniobras que permitan a los demás aprovechar tu condición de guía. Una seña concertada señalando ciertos imprevistos del camino pueden ser de gran ayuda a quienes te siguen. Alzar una mano ante ese imprevisto, Puede ser un ejemplo.
A veces, el guía olvida su responsabilidad, y hace circular a los demás por encima de sus posibilidades. Éste no debe ser, como decíamos, el más rápido, ni siquiera el más experto, sino "el más sabio". El guía debiera asumir su papel con generosidad: debe conducir pensando que su posición en cabeza sea útil a los demás, incluso a nivel de conducción pura (marcar imprevistos del camino, los puntos de frenada, marcar un comportamiento sensato en el campo) más que siendo insolidario o incluso mal compañero ("ahora aprovecho que mi quad corre más en la recta y me escapo, y así verán...")
Igualmente, sobre todo si dispone de un quad comparadamente rápido, el líder no debe utilizar las rectas para encender el ritmo, sino para agrupar cortando gas si es necesario. Las rectas permiten al resto del grupo recuperar con mucha mayor seguridad los metros y el retraso perdidos en alguna zona más complicada.
No escojas para liderar el ritmo de tu grupo al más rápido. Ni siquiera al más experto. Escoge, como decimos, al más sabio.
Cuando "sigues": No intentes demostrar continuamente al primero del grupo que "aunque voy detrás, podría adelantarte cuando quiera" enseñando rueda en las frenadas o circulando demasiado cerca o casi en paralelo. Aplícate en mantener su ritmo, sin acelerones bruscos o frenadas demostrativas de tu mejor nivel: piensa en los que te siguen...
Cuando "no sigues": Si te das cuenta de que "para seguirles" -o incluso también para ocupar el lugar de guía- debes ir por encima de tus aptitudes o las de tu quad, relájate, piensa en que es mejor llegar tarde que no hacerlo... y acógete al "manual de excusas" de tu piloto favorito: "es que los neumáticos que trae de la casa, son chinos y no agarran..." El guía debe llevar el ritmo del más lento.
En general…
…no te piques: asume tu ritmo en lugar del de los demás, y no pretendas recuperar en un corto tramo el tiempo perdido en esa zona complicada que se te ha resistido.
…mantén la cabeza fría: el campo no es un circuito, así que si quieres demostrar lo que vale tu quad o lo que eres capaz de hacer, dirígete a uno de ellos para participar en tandas abiertas o, incluso, en algún cursillo de conducción.
Lograrás un nivel de conducción mucho más alto, mejorarás increíblemente tu seguridad y, quizás lo más importante, te darás cuenta de que lo que se puede disfrutar, puro placer, buscando el límite de tu aptitud y de las capacidades de tu quad en una pista cerrada y con plena seguridad... no tiene punto de comparación ante el peligro que representa hacerlo en el campo abierto al tráfico
PARA LLEVAR A LA PRÁCTICA
Huye de apelotonamientos, son peligrosos por no guardar las distancias de seguridad, el polvo e incluso sabemos que no es recomendable el ruido excesivo de todo el pelotón a la vez en el campo. Además, pese a que cada vez es más habitual el uso del GPS, aún hay muchos aficionados que no disponen de uno, y el temor a perdernos, nos obligará, en ocasiones a ritmos desenfrenados.
Te proponemos dos métodos para que todo el grupo pueda seguir al guía evitando tensiones y que se desperdigue "haciendo la goma" obligando a sus miembros a ritmos desesperados para recuperar el terreno perdido. Lo mejor es que cada grupo escoja el que mejor se adapte. Circular sin nerviosismos innecesarios en el grupo es la mejor manera de evitar accidentes.
Método "miga de pan": En cada cruce, cada miembro del grupo deja marchar a los que le preceden, y espera allí detenido la llegada del siguiente quadtrero. Así, reemprende la marcha sólo cuando aprecia que éste ya le ha visto y sabe la dirección correcta. En este caso se mantiene el orden inicial, pero la línea de quad se desperdiga (no se aprovecha la trazada abierta por los demás) y se pierde tiempo en cada cruce al deber esperar todos y cada uno de sus miembros sucesivamente.
Método "de guardia": En los cruces necesarios, el líder "ordena" (mostrándolo claramente con un gesto de la mano) que el segundo quadtrero se detenga a un lado, situándose ya marcando la dirección correcta, hasta que pase todo el grupo. El resto, con el tercer quadtrero convertido ya en el segundo –será el próximo en quedarse de guardia en la próxima intersección- ha seguido al líder. El "quad de guardia" reemprende la marcha al final del grupo, y permanecerá en ese lugar hasta que por turno vuelva a ir remontando posiciones. Con el método "de guardia" el grupo circula mucho más cohesionado y en cada cruce sólo debe detenerse un quadtrero, con lo que se incrementan ritmo y seguridad.
Esperamos que estos recordatorios os sirvan de ayuda en la temporada que ya comienza, llevarlos a la práctica es muy sencillo y vuestras familias, esas que os esperan en casa, agradecerán que regreséis de una sola pieza. Además recordarás esa ruta con satisfacción.
Si cada vez que tengáis que tomar un riesgo en el campo pensáis que vuestras familias dependen de vuestro trabajo del “lunes a las ocho” seguro que saldréis airosos de la situación.
PREVENIR ACCIDENTES
Generalmente utilizamos nuestros quad compartiendo salidas de fin de semana con nuestros colegas, y lo hacemos en grupo...El problema principal radica en que dejamos surgir nuestro temperamento competitivo frecuentemente y, unos por otros, circulamos por encima de nuestras posibilidades. Está claro que evitar esos sustos y accidentes tienen fácil solución, ya que de la mayor parte de estos incidentes es responsable esta competitividad, con lo que la solución la tenemos nosotros mismos haciendo tan sólo un examen de conciencia, y no dejarnos llevar.
Aparejado al problema principal sobrevienen otros: no dejar la suficiente distancia de seguridad entre vehículos, con los consiguientes alcances ante imprevistos; no prestar suficiente atención a la conducción puede producir salidas de vía; o incluso intentar recuperar un tiempo perdido por alguna eventualidad breve, puede conducirnos a un accidente de determinada gravedad. Evitar esto está en nuestras manos, apreciando nosotros mismos las circunstancias que nos rodean.
Una maniobra que merece especial atención son los adelantamientos, aunque se trate de una pista ancha, constituyen un factor de riesgo muy alto, ya que, generalmente, la configuración de los caminos no permite esta maniobra y un enganche de dos quad puede resultar fatal. Se hace necesario respetar escrupulosamente un orden dentro del grupo y no quebrantarlo bajo ningún concepto.
También hay que dar un toque de atención a aquellos amigos de la “conducción divertida”. Demostrar quien es el más rápido del barrio, un “fredispencer” que se sitúa de guía y mantiene un ritmo alto durante la ruta para demostrar el porqué de llevar esos “galones”, no es necesario. Debemos ponernos en la piel de aquéllos que nos acompañan y tienen escasa experiencia, o incluso aquéllos que por determinadas circunstancias llevan tiempo sin montar, con lo que el guía del grupo tendrá que adecuar su velocidad a la del compañero más lento, esto hará más sólido al grupo, y mientras los novatos aprenden a su ritmo, los más expertos podrán disfrutar de los paisajes.
Es cada vez más común que el usuario de quad veterano tenga más de 30 años, y cierta experiencia en la conducción de quad. Que la experiencia, pues, nos haga más sabios en lugar de más rápidos...
SOLUCIONES
La solución a todos estos problemas las tenemos en nuestras propias manos. De viaje es preciso guardar aún más la distancia de seguridad debida, y se debe circular ligeramente fuera de la estricta "fila india", con suficiente distancia entre vehículos y con luces encendidas: ello permite una correcta visión trasera del grupo a través de los retrovisores.
Debemos recordar que en ruta es necesario ser el “ángel de la guarda” del compañero que llevamos detrás, de este modo todos estaremos siempre controlados por algún compañero si nos surgiera algún incidente, pudiendo limitar incluso el ritmo del grupo, simplemente “soltando gatillo”, si alguno de sus componentes se encuentra incómodo con la marcha que llevamos.
Además, con esto evitaremos tener que volver sobre nuestros pasos para ver qué le ha ocurrido a ese colega que no llega a nuestro punto. Esta maniobra no tendría que realizarse si vigilamos convenientemente a nuestro compañero de detrás, y llegado el caso de tener que practicarla, la realizaremos con suma precaución, ya que generalmente nuestro compañero rezagado intentará llegar a la mayor brevedad posible, lo que unido a lo estrecho de los caminos puede llevar a un choque frontal y sus fatales consecuencias.
EN RUTA
Cuando eres el guía: Mantén un ritmo consistente, suficientemente atento como para que todos disfruten de la conducción, y aplícate a marcar una buena trazada y a dibujar unas maniobras que permitan a los demás aprovechar tu condición de guía. Una seña concertada señalando ciertos imprevistos del camino pueden ser de gran ayuda a quienes te siguen. Alzar una mano ante ese imprevisto, Puede ser un ejemplo.
A veces, el guía olvida su responsabilidad, y hace circular a los demás por encima de sus posibilidades. Éste no debe ser, como decíamos, el más rápido, ni siquiera el más experto, sino "el más sabio". El guía debiera asumir su papel con generosidad: debe conducir pensando que su posición en cabeza sea útil a los demás, incluso a nivel de conducción pura (marcar imprevistos del camino, los puntos de frenada, marcar un comportamiento sensato en el campo) más que siendo insolidario o incluso mal compañero ("ahora aprovecho que mi quad corre más en la recta y me escapo, y así verán...")
Igualmente, sobre todo si dispone de un quad comparadamente rápido, el líder no debe utilizar las rectas para encender el ritmo, sino para agrupar cortando gas si es necesario. Las rectas permiten al resto del grupo recuperar con mucha mayor seguridad los metros y el retraso perdidos en alguna zona más complicada.
No escojas para liderar el ritmo de tu grupo al más rápido. Ni siquiera al más experto. Escoge, como decimos, al más sabio.
Cuando "sigues": No intentes demostrar continuamente al primero del grupo que "aunque voy detrás, podría adelantarte cuando quiera" enseñando rueda en las frenadas o circulando demasiado cerca o casi en paralelo. Aplícate en mantener su ritmo, sin acelerones bruscos o frenadas demostrativas de tu mejor nivel: piensa en los que te siguen...
Cuando "no sigues": Si te das cuenta de que "para seguirles" -o incluso también para ocupar el lugar de guía- debes ir por encima de tus aptitudes o las de tu quad, relájate, piensa en que es mejor llegar tarde que no hacerlo... y acógete al "manual de excusas" de tu piloto favorito: "es que los neumáticos que trae de la casa, son chinos y no agarran..." El guía debe llevar el ritmo del más lento.
En general…
…no te piques: asume tu ritmo en lugar del de los demás, y no pretendas recuperar en un corto tramo el tiempo perdido en esa zona complicada que se te ha resistido.
…mantén la cabeza fría: el campo no es un circuito, así que si quieres demostrar lo que vale tu quad o lo que eres capaz de hacer, dirígete a uno de ellos para participar en tandas abiertas o, incluso, en algún cursillo de conducción.
Lograrás un nivel de conducción mucho más alto, mejorarás increíblemente tu seguridad y, quizás lo más importante, te darás cuenta de que lo que se puede disfrutar, puro placer, buscando el límite de tu aptitud y de las capacidades de tu quad en una pista cerrada y con plena seguridad... no tiene punto de comparación ante el peligro que representa hacerlo en el campo abierto al tráfico
PARA LLEVAR A LA PRÁCTICA
Huye de apelotonamientos, son peligrosos por no guardar las distancias de seguridad, el polvo e incluso sabemos que no es recomendable el ruido excesivo de todo el pelotón a la vez en el campo. Además, pese a que cada vez es más habitual el uso del GPS, aún hay muchos aficionados que no disponen de uno, y el temor a perdernos, nos obligará, en ocasiones a ritmos desenfrenados.
Te proponemos dos métodos para que todo el grupo pueda seguir al guía evitando tensiones y que se desperdigue "haciendo la goma" obligando a sus miembros a ritmos desesperados para recuperar el terreno perdido. Lo mejor es que cada grupo escoja el que mejor se adapte. Circular sin nerviosismos innecesarios en el grupo es la mejor manera de evitar accidentes.
Método "miga de pan": En cada cruce, cada miembro del grupo deja marchar a los que le preceden, y espera allí detenido la llegada del siguiente quadtrero. Así, reemprende la marcha sólo cuando aprecia que éste ya le ha visto y sabe la dirección correcta. En este caso se mantiene el orden inicial, pero la línea de quad se desperdiga (no se aprovecha la trazada abierta por los demás) y se pierde tiempo en cada cruce al deber esperar todos y cada uno de sus miembros sucesivamente.
Método "de guardia": En los cruces necesarios, el líder "ordena" (mostrándolo claramente con un gesto de la mano) que el segundo quadtrero se detenga a un lado, situándose ya marcando la dirección correcta, hasta que pase todo el grupo. El resto, con el tercer quadtrero convertido ya en el segundo –será el próximo en quedarse de guardia en la próxima intersección- ha seguido al líder. El "quad de guardia" reemprende la marcha al final del grupo, y permanecerá en ese lugar hasta que por turno vuelva a ir remontando posiciones. Con el método "de guardia" el grupo circula mucho más cohesionado y en cada cruce sólo debe detenerse un quadtrero, con lo que se incrementan ritmo y seguridad.
Esperamos que estos recordatorios os sirvan de ayuda en la temporada que ya comienza, llevarlos a la práctica es muy sencillo y vuestras familias, esas que os esperan en casa, agradecerán que regreséis de una sola pieza. Además recordarás esa ruta con satisfacción.
Si cada vez que tengáis que tomar un riesgo en el campo pensáis que vuestras familias dependen de vuestro trabajo del “lunes a las ocho” seguro que saldréis airosos de la situación.
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